Tomando Café #17 La invención del viaje

De: Juliana González-Rivera.

Si desean que sus hijos o sus alumnos, según el caso, adquieran el hábito de la lectura, no les forcéis, simplemente déjenle a la vista un libro o el periódico. Si ven que han elegido uno de estos ejemplares, esperen a que pase un tiempo para preguntarles que cosa les llamo la atención y el dialogo se abrirá; no hay cosa mas dichosa a que nos pregunte sobre lo que hemos leído.

Padres, léanles a sus chicos y cuando ellos sepan deletrear, escúchenles, pidan que lo hagan en voz alta; así, unas veces leerán ustedes, otras lo harán ellos. Más grandecitos querrán leer sin ser interrumpidos, entonces, causa conseguida. No hubo necesidad de forzar. Como lo expresó el intelectual, escritor tulueño, Daniel Potes Vargas cuando fue entrevistado por el periodista William Loaiza, en su programa, La Campana.

  • Los alumnos dicen: la profesora nos puso a leer. ¡No! ¡Eso es una bellaquería! La lectura se disfruta, debe ser una nacencia como lo del chamizo, algo que le viene al alumno, que diga: profesor, estoy leyendo una novela.

Si ustedes no son escritores, no importa, será bueno que ellos vean que escriben. Lean delante de sus hijos, el ejemplo es el mejor maestro. Todo ha de ser como viajar, y aquí es cuando cito a Juliana González-Rivera con su libro La invención del viaje. La historia de los relatos que cuentan el mundo.  

Un libro que recomiendo para que luego de una lectura en solitario, los padres lo dejen a la vista de sus proles, y los docentes lo muestren a sus discípulos.

El libro trata de todas las historias de viaje y de como la lectura y la escritura es un eterno caminar por el conocimiento.

En la página siguiente al titulo se inicia este andar señalando las obras, “El viaje» de Sergio Pitol:  – El viaje está por terminar, ¡oh!, desventura.

Saint-Exupéry, “Ciudadela»

Pedro Sorela con, “Historia de las despedidas»,  –En los ojos del perro se aleja el barco y comienza el viaje. No hay llegada, viaja quien sabe irse.

Y por ultimo en ésta pagina, Mallarmé con “Brise marine» Ciento sesenta y pico de páginas en las que abunda seres extraordinarios, con sus obras aventureras dignas de ser releídas o para motivar a los nuevos excursionistas a que se arriesguen a la mejor delicia, la lectura,  y con ello, puedan lograr, porque no, escribir.

Ph. D en Periodismo y especialista en literatura de viaje POR LA UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID. Periodista cultural; profesora de periodismo; columnista en el Periódico El Mundo de Medellín. … En el 2005 recibí el Premio Nacional de Periodismo PPEU en la categoría de opinión.

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