Por: Marcial Blandón
Un trago amargo pasa por estos días el exalcalde tulueño Gustavo Adolfo Vélez Román, con la citación que le hizo la Procuraduría General de la Nación, a la audiencia de versión libre, en el marco de la investigación disciplinaria que este ente de control adelanta por las presuntas irregularidades en el nombramiento de la abogada Suslly Ávila Navarrete, como directora del Instituto Municipal para la Recreación y el Deporte, Imder. No cumplir con el lleno de los requisitos en cuanto al perfil que se requiere para ocupar el cargo es el motivo de la investigación.
Aunque ya en el morbo de los corrillos políticos hablan de la condena disciplinaria en contra del exalcalde Gustavo Vélez, lo cierto es que el llamado de la Procuraduría, sirve para que Vélez Román, pueda demostrar la transparencia de los actos administrativos que dieron lugar durante su administración al nombramiento de la profesional del Derecho Suslly Ávila, en la dirección del Imder. Sus detractores políticos ya lo ven con una sanción disciplinaria a cuesta, cuando falta mucho trecho para que el órgano de control produzca la providencia que es objeto de apelación en una segunda instancia.
Los más beneficiados con un posible revés de Gustavo Vélez, en el órgano de control disciplinario, son los precandidatos a la alcaldía de Tuluá, que le sacarían del camino a un rival de quilates, en la contienda electoral del 2023. En los mentideros políticos se asegura que Vélez Román, es hoy en día el único ciudadano capaz de arrebatarle la próxima alcaldía al binomio Dilian – J. J. Gómez. Su gestión como alcalde en el período 2016-2019, la que un sector de tulueños califica como excelente lo tiene en la retina de la ciudadanía como potencial repitente para el cuatrienio 2024-2027.
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El hijo de Timbiquí, Clímaco Montaño, polifacético personaje, experto como ningún otro en temas políticos cumplió su ciclo laboral en el hospital Departamental Tomás Uribe, para dedicarse de lleno a la noble pasión partidista. Mucho se especuló con una foto montaje donde Clímaco, aparece dándole un abrazo al candidato presidencial Federico Gutiérrez, a lo que se dijo que obedeció su retiro de la Institución Hospitalaria.
Lo cierto es que Clímaco Montaño, vive 24/7 para la actividad política. En las consultas de los partidos apoyó a Francia Márquez, y para primera vuelta presidencial apoya a brazo partido la candidatura de Gustavo Petro. Su retiro del Hospital Tomás Uribe, le permite dedicarse de lleno a la elección presidencial de la fórmula del Pacto Histórico, sin perder de vista las elecciones de 2023, donde aseguran, en que su nombre entra en el sonajero.
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Carlos Arturo Reyes, es licenciado en Educación Física con énfasis en Educación Física, Recreación y Deporte egresado de la Uceva, que ha incursionado en el quehacer político de la región impulsando, en su momento, el nombre de Edier Pedraza, quien aspiró al Concejo de Tuluá por el Partido Conservador obteniendo algo más de 800 votos. Luego, Edier Pedraza, tras la jornada electoral, decidió continuar su ejercicio proselitista en el Partido de la Unidad.
El excelente resultado obtenido en las urnas por Pedraza fue fruto del esfuerzo de Carlos Arturo Reyes, también conocido como El Profe Reyes, y de otros líderes que rodearon la aspiración a la Alcaldía de Tuluá del ingeniero Gustavo Vélez Román, cuando éste resultó electo en el período 2016-2019.
Ahora, cuando se empiezan a develar nombres que podrían postularse al Alcaldía y el Concejo, un grupo de ciudadanos ha sugerido el nombre de Carlos Arturo Reyes en reconocimiento a su liderazgo, vocación de servicio y dedicación a la promoción del deporte, la recreación y la cultura.
El Profe Reyes ejerció como Monitor de Fútbol en el Imder de Tuluá. Actualmente se desempeña como comerciante y adelanta una maestría en Pedagogía de la Cultura Física en la Unidad Central del Valle del Cauca, Uceva.
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Quien madrugó con el propósito de refrendar su credencial en las urnas en las elecciones de octubre de 2023, es el actual diputado por el partido de la U, Rodrigo Guzmán Dávila. El también escritor de La Caleta que con un poco más de ocho mil votos se quedó con la última curul del partido de la U, intensifica su labor para doblar ese resultado electoral. Alianzas y adhesiones de dirigentes de varios municipios del Valle, e incluso de otras colectividades, es su aspiración para fortalecer su potencial electoral.
Rodrigo Guzmán, es reconocido en la clase política como una “Toyota”, por la forma en que encara sus aspiraciones electorales; así quedó demostrado cuando aspiró a la alcaldía de Tuluá y su candidatura a la Asamblea del Valle. Con mayor planificación en su trabajo proselitista el éxito se da por descontado, es incansable visitando las comunidades, si logra más y mayor organización de sus cuadro directivos, la suya puede ser una de las candidaturas más votadas al interior de la lista que presente el partido de la U, para la Duma departamental.
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Cumple una destacada gestión al frente de la Personería Municipal la abogada María Victoria Castro Quintero, en la delegación que se hiciera como encargada del Ministerio Público, a raíz de la renuncia que presentó al cargo Pedro Antonio Ordoñez, elegido como Contralor Distrital de Santiago de Cali. Castro Quintero, de acuerdo a los entendidos en la materia viene cumpliendo a cabalidad las funciones del cargo para el cual la encargaron. Su experiencia en el sector público sale a relucir en cada una de sus actuaciones.
En la inauguración de los juegos intercolegiados que salieron desde el corregimiento de Barragán y en un vistoso desfile recorrieron varias vías del municipio hasta culminar en las instalaciones del coliseo cubierto Benicio Echeverry, allí, en la mesa de honor fue invitada la Personera Municipal (e) María Victoria Castro. Como no lo olvidan los tulueños Castro Quintero, fue anunciada por la gobernadora electa Clara Luz Roldán, como gerente de la Beneficencia del Valle, designación que movió el más bajo instinto del “canibalismo” tulueño, que ante una llamada del jefe de la “Nueva Generación”, el nombramiento se cayó.