Por: Marcial Blandón
Cuando grandes nubarrones de tristeza, llanto y dolor se toman el firmamento de Tuluá, a raíz de la tragedia ocurrida al interior del patio número ocho del establecimiento penitenciario y carcelario de mediana seguridad que la madrugada del martes 28 de junio cobró 51 vidas y dejó lesionadas más de 30 personas, viene a nuestra memoria la publicación oficial que en sus cuentas anunció el actual Representante a la Cámara del partido Conservador Gustavo Padilla Orozco, el viernes 14 de febrero de 2020, del encuentro sostenido con el entonces director del Inpec Tuluá, Capitán (r) Gonzalo Rivera Cardona, sobre la designación hecha por la mesa directiva de la alta corporación como ponente del proyecto de Ley que transformaban el régimen penitenciario y carcelario de Colombia.
Según lo anunciado por el legislador Conservador la reforma penitenciaria y carcelaria era un dechado de virtudes, una verdadera resocialización de quienes han caído en desgracia, más que centro carcelario los establecimientos figuraban como unidades de producción. Como mucho de lo que pasa en el país, la iniciativa quedó en letra muerta, la reforma no tuvo éxito en el Congreso, su trámite fracasó. Que lo acontecido en la cárcel de Tuluá, sea el motivo para que el gobierno del presidente Gustavo Petro, que se instala el próximo siete de agosto adelante una profunda transformación del sistema carcelario.
Igualmente, que la Fiscalía inicie una pronta investigación para que la ciudadanía tenga claridad sobre lo que realmente ocurrió al interior del patio número ocho de la Cárcel de Tuluá. Si realmente se trató de una eventual pelea entre internos, o se trató de una vendetta que a primeras horas del día había previsto la muerte de uno de ellos. Los parientes de las víctimas también merecen la verdad de por qué la gran mayoría murió por heridas de cuchillo cuando la versión oficial indicaba que el deceso fue provocado por las llamas y el humo producido por los colchones incinerados. Igual, que se defina responsables por la inexistencia de un inadecuado sistema de control de incendios. Quedan muchas preguntas por responder y que la justicia defina los responsables de este lamentable hecho.
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La dirigencia local del Pacto Histórico, sigue trabajando para consolidar en la ciudad lo alcanzado en segunda vuelta que contribuyó con el amplio triunfo en las urnas de la fórmula presidencial conformada por Gustavo Petro y Francia Márquez. El dirigente sindical Rubiel Arana, vocero de esta colectividad en la Villa de Céspedes, anuncia para este sábado 2 de julio, la presencia en la ciudad de los Senadores Alexander López Maya, Wilson Arias, Roosvelt Rodríguez y del dirigente Ferney Lozano.
La cita está prevista a partir de las 3:00 pm, en la plazoleta del quinto piso del Hotel Café Plaza, donde se socializará el camino a recorrer después de la victoria. La alta dirigencia del Pacto Histórico, compartirá con su militancia en la ciudad los últimos aconteceres del gobierno electo que regirá los destinos del país en los próximos cuatro años. Ambiente de camaradería reina en las huestes políticas del sector ganador el pasado 19 de junio.
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El salón principal del Hotel Guadalajara de Buga, será el epicentro este sábado dos de julio, a partir de las seis de la tarde del informe de gestión del período 2018-2022, del Senador de la República por el partido Centro Democrático, John Harold Suárez Vargas. El evento servirá para conocer la gestión adelantada en el legislativo por uno de los congresistas mejor calificados del actual partido de gobierno.
Se reconoce en el Senador John Harold Suarez, su capacidad de gestión, reflejada en muchas obras que se ejecutaron en los municipios del centro del Valle, ponente de proyectos que hoy son leyes de la República y autor de iniciativas legislativas que buscaron generar progreso y desarrollo en su natal Buga. Una vez deje su curul a partir del 20 de julio, Suárez Vargas, despeja el camino para un eventual tercer candidatura a la alcaldía de la ciudad Señora. Su nombre no se puede descartar, especialmente cuando goza de gran aceptación en la comunidad bugueña.
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Se dio inicio al proceso de transición de la Junta de Acción Comunal de la Urbanización Bosques de Maracaibo, uno de los sectores más populares en la Villa de Céspedes. La líder comunal María Teresa Borrero Salgado, le da paso en la dirección de la JAC, al educador Héctor Fabio Buitrago Terranova. La comunidad tuvo en el pasado la presidencia de los hermanos Arturo y Jaime Franco Patiño.
Existe gran expectativa por el nuevo aire que tomaron las Juntas de Acción Comunal, abonadas con el respaldo que desde ya se anuncia brindará el nuevo gobierno nacional en cabeza del presidente de la República, Gustavo Petro. Según lo dicho en campaña, las JAC, serán bastiones para canalizar el apoyo del Estado en materia de educación, salud y la parte social. En buena hora, asume Héctor Fabio Buitrago, la dirección de su comunidad, de un gobierno afín a su pensamiento.