Por: Marcial Blandón
Fiel a la promesa de político, el sector que en la ciudad orienta el movimiento Tuluá Líder o amigos del alcalde, le incumplió a los tulueños después de haber anunciado que el pasado 20 de febrero darían a conocer los resultados de la encuesta donde definían el precandidato a la alcaldía que saldría entre los nombres del abogado Llener Darío Borja Mafla o el coronel Jorge Alexander Gallego Chávez. Consecuentes con palabra de político le faltaron a la ciudadanía tulueña.
El incumplimiento al parecer tiene varios matices. La primera es que esta encuesta como la adelantada por el movimiento Nueva Generación que definió al licenciado Ever Villegas, como su candidato solo es conocida por los “interesados”; la opinión pública la desconoce y por ende la firma que la adelanta y la ficha técnica del proceso. Allí nace la primera suspicacia para conocer sobre la veracidad del asunto. Es donde coge fuerza la versión en que la carta ya está marcada.
También se asegura en corrillos políticos de la parroquia, que el ambiente al interior del movimiento Tuluá Líder está tenso y que el candidato perdedor de la encuesta no aceptaría los resultados, lo que se requiere un tiempo prudente para concientizarlo y que ese efecto no genere una desbandada. Otros dicen que los verdaderos resultados se filtraron a la opinión pública donde los dos candidatos del establecimiento marcan muy por debajo de sus adversarios políticos y que el nombre de uno de ellos, que aún no sale al escenario, los barre de tajo a rabo.
No presentar los resultados de la encuesta que definía el precandidato a la alcaldía entre Llener Borja y Jorge Gallego, del sector político que representa a los amigos del actual alcalde, para enfrentarlo en un nuevo sondeo a Ever Villegas, previsto para el mes de marzo, es un pésimo mensaje para la consolidación de la alianza entre las organizaciones políticas que gobiernan a la Villa de Céspedes. No entregar oportunamente los resultados de la encuesta le resta credibilidad a quienes pretenden gobernar la ciudad cuando dejan la palabra empeñada.
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El próximo domingo 29 de octubre, Tuluá elegirá dieciséis concejales a través del sistema electoral de umbral y cifra repartidora. En ese certamen electoral solo tiene escaño asegurado quien resulte segundo en la elección de alcalde, por supuesto, si su decisión es aceptar la curul; de no hacerlo, ascenderá el candidato que ocupe la posición diecisiete en el escrutinio final.
Del numeroso abanico de candidatos que aspiran a llegar a la Corporación edilicia, se destaca el nombre del abogado Diego Alejandro Vélez Ríos, quien ya aspiró en 2019, alcanzado un importante resultado electoral de 1.068 votos, fundamentales para que la colectividad alcanzara a elegir cinco representantes en el hemiciclo local. Para las elecciones de octubre el profesional del derecho aspira nuevamente en la lista del partido de la U, en una alianza con los dirigentes Andrés Santacoloma y Wilson Amador, que según observadores de la política local le garantizan presencia en el Cabildo para el período 2024-2027.
De darse la elección de Diego Vélez, su presencia en el Concejo sería de grandes proporciones. Durante el actual período se ha desempeñado como asesor jurídico de la corporación, lo que le ha generado un enorme conocimiento del desenvolvimiento del intríngulis en que debate, se planifica y desarrolla el control político; puede conocer como ningún otro los pormenores del Cabildo. De ser elegido, Vélez Ríos no llegaría a aprender, ni a parar en los procesos de inducción que para unos Conejales le basta un par de meses y para otros se la pasan los cuatro años aprendiendo.
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La precandidatura a la alcaldía de Riofrio de Viviana Mena Zapata, consolida su estrategia de campaña en el propósito de alcanzar el mayor reconocimiento de la ciudadanía riofriense y de sus potenciales electores. Administradora de Empresas de profesión, especialista en Gestión Pública y con amplia experiencia en el sector oficial son sus cartas de presentación.
En su trayectoria laboral Viviana Mena, ha sido secretaria de Hacienda del municipio de Riofrío en las administraciones de Robert Velásquez y de Heriberto Cabal Aguilar; se desempeñó como asesora financiera en la alcaldía de la Cumbre; en Bugalagrande, en el área de inspección, vigilancia y control; ocupó el cargo de Subgerente Administrativa y Financiera del hospital Kennedy de Riofrío, estuvo en calidad de profesional universitaria en el proceso de fiscalización de esta misma localidad.
En el sector privado Viviana Mena, se desempeñó como auxiliar administrativa de la entidad Coomeva EPS. Su candidatura es considerada como el relevo generacional de la clase política de la capital mundial del “Bofe y la Fritanga”. Su presencia en la arena política es la consolidación del proyecto de gobierno “Juntos lo Haremos mejor” que aspira a convocar a diferentes fuerzas políticas del municipio en su eventual gobierno.
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Ever Villegas fuerte en el sector femenino. Mayra Alejandra Parra, Maribel Robledo, Carolina Flórez y Sara Duque, tienen en común que son mujeres que quieren ser concejalas del municipio de Tuluá, pero además que decidieron acompañar al licenciado Ever Villegas a la Alcaldía.
Estas cuatro mujeres nuevas en la política, pero dos de ellas ya contadas en las urnas con más de quinientos votos cada una hacen parte de otras 10 mujeres dirigentes políticas que ya están trabajando la campaña a la Alcaldía.
Entre ellas se destacan los nombres de Consuelo Cifuentes, que obtuvo en las pasadas elecciones 2,768 votos, Sulay Córdoba que sacó 1.700 votos y exconcejales como Martha Córdoba y Martha Londoño, quienes vuelven al ruedo político y ya le hicieron reuniones de respaldo a Villegas.
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A propósito de Ever Villegas, inicio con gran aceptación sus visitas puerta a puerta a las comunidades con la estrategia denominada “De los desechos a los hechos”.
Inicio en el barrio Bosques de Maracaibo, el lunes y anoche martes recorrió el barrio Bolívar, San Pedro Claver y Buenos Aires acompañado de su esposa, María Claudia Gómez Cortez y del excandidato a la Alcaldía Luis Fernando Ocampo, “Chiri”, así como con más de medio centenar de líderes políticos y sociales que lo respaldan en su aspiración a la alcaldía de Tuluá.
Villegas busca en estos recorridos hablar con la gente y recolectar 5 millones de botellas plásticas, para construir cinco parques ecológicos elaborados con material reciclable en un trabajo comunitario y de sensibilización frente a una cultura ambiental para la ciudad.
Villegas ya logró recoger 2 millones de botellas y ya tiene para mostrar dos parques ecológicos, el primero en el corregimiento La Moralia y el segundo en el barrio Internacional de nuestra ciudad. ¡Ahora va por 5 más!
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El sector religioso en la Villa de Céspedes, ha contado con permanente presencia en la actividad política de la ciudad, pero con escasa representación por no decir mínima en los cargos de elección popular. En los años noventa la cruzada estudiantil C-4, tuvo representación en el Concejo municipal, en la década del 2000 la Unión Cristiana, eligió a un cabildante que según dicen, ni siquiera pasaba las puertas de esa congregación religiosa a participar del culto.
De resto los intentos de los políticos religiosos han sido fallidos en hacerse elegir en representación de partidos creyentes. Desde el 2015, en el panorama político de Tuluá, está la figura de un joven fogoso y lleno de fe, pero carente de electores para hacerse elegir como concejal del municipio, se trata de Daniel Alfredo Cabrera Londoño. En esa época se presentó como candidato del desaparecido partido Opción Ciudadana.
En el 2019, se candidatizó por el partido Conservador y le quedaron faltando más de los cinco pesos para hacerse elegir. Se le abona a Daniel Cabrera, su tenacidad y perseverancia que puede ser puesta en juego nuevamente para el proceso eleccionario de 2023 en lo local. Sus votos por lo menos le han servido para mantener a su esposa en el sector oficial, en el gobierno de Gustavo Vélez, y ahora en el de John Jairo Gómez Aguirre, en la Personería Municipal.
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