Por: Marcial Blandón
El precandidato a la alcaldía de Tuluá por el partido Conservador Carlos Arturo Londoño Marín, continúa adelantando presencia en diferentes sectores de la ciudad socializando sus propuestas de gobierno que cada día calan más en el sentir de la comunidad. “Que ningún tulueño se acueste sin comer” y garantizar las tres comidas diarias es una de las propuestas que llaman la atención de la ciudadanía.
En la fundación “De la mano con la profe” el precandidato a la alcaldía dio a conocer los alcances de su iniciativa y los mecanismos en que la implementará en el evento de resultar elegido como el próximo mandatario de los tulueños. Dirigiéndose al numeroso grupo de asistentes, el concejal Londoño Marín, dijo: “Juntos vamos a lograr grandes cosas y el cambio que queremos ver en nuestra ciudad”.
En la confortable sede política del barrio Sajonia, Carlos Arturo Londoño, ha institucionalizado el viernes como el día de la tertulia, donde artistas amenizan la noche a la par de las propuestas que el aspirante expone a la ciudadanía tulueña. El número de líderes comunales y líderes sociales se incrementa cada día en las huestes del precandidato a la alcaldía por el partido Conservador.
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Indiscutiblemente el liderazgo de la exgobernadora del Valle Dilian Francisca Toro Torres, quedó ratificado a nivel nacional por la posición política que asumieron los partidos Liberal, Conservador y de la U, en relación a la Reforma a la Salud radica por el gobierno del presidente Gustavo Petro, para estudio del Congreso de la República. Los conocimientos en esta materia y su experiencia en el ramo no solo por su condición de médica, sino haber sido Secretaria de Salud departamental, la destacaron como una estudiosa y parte vital en las líneas que marcaron cada colectividad para separarse del apoyo a la iniciativa gubernamental.
Dilian, es hoy por hoy la dirigente de mayor prestancia a nivel nacional de esta región del País, pese a que todavía no ha oficializado su aspiración a ser candidata a la Gobernación del Valle o a la alcaldía distrital de Santiago de Cali. Opinadores de la política vallecaucana le dan amplias posibilidades de triunfo en el escenario al que se presente. Es tal la tranquilidad y peso electoral de la médica Toro Torres, que solo hasta junio definirá si se presenta como candidata y el escenario al cual aspira ser elegida si lo hace o si prefiere mantenerse cómo directora nacional del partido de la U.
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Seguidores de una de las precandidaturas a la alcaldía que promueve el nombre de uno de los amigos afines al establecimiento que manda en lo local siguen atizando la hoguera de la división de la alianza que gobierna a Tuluá. Se han ido lanza en ristre en contra de la exitosa actividad que organizó el pasado viernes el precandidato a la alcaldía de la Villa de Céspedes por el partido de la U, Ever Antonio Villegas Morante, que movilizó cientos de tulueños hasta el coliseo cubierto del colegio Salesiano.
Lo inverosímil del asunto es que los ataques no provienen de candidatos o amigos de estos de otras orillas políticas. No, la cizaña proviene del interior de los amigos de los mismos precandidatos que buscan la nominación de unidad de los sectores políticos Nueva Generación y Tuluá Líder, que insisten en hacerse daño a como dé lugar. Bien dice el adagio popular que “sufre más el velón que el dueño de la sopa”.
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Álvaro Marmolejo, es un referente cultural en la ciudad, pese al avance de la modernidad tecnológica que invade a nuestra sociedad, con estoicismo se ha mantenido vigente a través del emblemático Teatro Sarmiento, donde se han proyectado los filmes más importantes en la historita cultural de Tuluá. Últimamente esta actividad se ha visto amenazada, según el gestor cultural, por las acciones que ha emprendió la Administración municipal desde la Secretaría de Gobierno.
Según Álvaro Marmolejo, presentar una obra de teatro es cada día más difícil por la cantidad de requisitos que exigen desde el gobierno local, que puede hacer inviable el ejercicio comercial del Teatro Sarmiento. Hace trece años el Estado a través del gobierno local dejó de hacer presencia alguna en el Teatro; ahora reaparece acompañado de la Policía y forzando a un cierre técnico. Todo indica que el emblemático Teatro Sarmiento no la pasa bien con las autoridades locales; ojalá se llegue a un punto de equilibrio, para que uno de los últimos íconos de la cultura tulueña siga proyectando y presentando actos culturales en vivo, los que cada día son menos por el auge de la tecnología que absorbió el interés de los espectadores. Un punto de quiebre entre gobierno local y el Teatro, caería como bálsamo para los amantes de las artes escénicas.