Por: TODO NOTICIAS
Atendiendo el llamado de un establecimiento comercial ubicado en la zona céntrica de Tuluá, se logró el rescate de dos zarigüeyas adultas que posiblemente habitaban en el techo de la vivienda, en la que hoy funciona el local.
Luego del colapso de una parte del cielo raso durante el fin de semana, las zarigüeyas cayeron a la oficina y quedaron atrapadas. Los funcionarios de la CVC se desplazaron al lugar a realizar el rescate de una de ellas, sin embargo, al día siguiente se recibió un nuevo llamado, al descubrir la presencia de otro individuo.
«Es importante el reconocimiento de la fauna como parte del espacio urbano, teniendo en cuenta que se trata de especies silvestres que han logrado adaptarse, de alguna manera, a los cambios provocados por el hombre sobre el ambiente natural, hoy transformado en ciudad», explicó la ingeniera Diana María Montes, funcionaria de la DAR Centro Norte de la CVC.
La Corporación hace un llamado a la comunidad para que mantenga buenas relaciones con la fauna silvestre, en el sentido de velar por su protección, no maltratarla y llamar a la autoridad ambiental cuando esté amenazada su supervivencia.
«Se debe propender por la buena relación hombre, fauna y hábitat urbano, debido a que en todos los niveles recibimos bienes y servicios ambientales. A nivel urbano, las poblaciones de zarigüeyas cumplen una importantísima función de control biológico de roedores (ratones y ratas), mientras que, en su entorno natural, desempeña una función de dispersión de semillas y contribución en la cadena trófica, al ser presa de animales de la avifauna y felinos», concluyó la profesional.