En esta imagen tomada de Facebook se aprecia el Palacio de Justicia de Tuluá cuando es destruida por las llamas provocadas por el grupo que hace parte del Paro Nacional y que se autodenomina la ‘Resistencia’.
Como respuesta a la acción del Ejército y el Esmad que en las últimas horas desbloqueó las salidas Norte y Sur de Tuluá, el grupo denominado la ‘Resistencia’ incendió el Palacio de Justicia y una Concesionaria de motos, atacó con piedras la sede de la Alcaldía de Tuluá, la Fiscalía, establecimientos bancarios y comerciales en acciones que comenzaron la tarde de este martes y se han extendido a lo largo de esta noche.
Mediante un audio conocido en un grupo de WhatsApp, un promotor de la ‘Resistencia’ advirtió que “esto se va a putear, ellos creyeron que porque nos iban a quitar de la primera línea nosotros nos vamos a quedar así? Nosotros no somos solo los que estábamos allí, nosotros somos más”.
Los protestantes, que dicen hacer parte del Paro Nacional, llegaron a la Plaza Cívica Batalla Boyacá en bicicletas y cargando morrales con piedras.
En la fachada de la sede Administrativa de la Alcaldía, los promotores de esta insurrección fijaron imágenes de los jóvenes que el pasado lunes fueron hallados muertos con heridas de arma blanca y que hacían parte de la ‘Resistencia’. Sus cuerpos fueron encontrados en la vereda Los Caimos y el barrio Portales del Río. Son ellos: Jesús David Vallejo Ruiz, de 20 años de edad, Pablo Esteban Riega, 16, Duvan Andrés Orozco Correa, de 20 y Óscar Iván Restrepo Acosta, de 19.
Al parecer desde la Administración Municipal, ya se conocía los planes de la ‘Resistencia’. Desde muy temprano habían ordenado a los funcionarios ejercer sus labores desde sus casas.
A eso de las tres y media de la tarde la lluvia de piedras empezó a romper los cristales de la Alcaldía, algunos bancos y establecimientos comerciales. Luego siguieron con la fachada de la Fiscalía y en horas de la noche incendiaron el Palacio de Justicia. El Benemérito Cuerpo de Bomberos, cuya sede se encuentra a cien metros del Palacio no pudo actuar para evitar la destrucción de la edificación y de sus archivos judiciales porque los protestantes lo impidieron, según denunciaron los socorristas.
Minutos después que llegó la ‘Resistencia’, la Policía y el Esmad respondieron con gases lacrimógenos. Pese a ello, los protestantes no se dispersaron sino que por el contrario siguieron respondiendo con piedras. Y entrada la noche, cuando la ‘Resistencia’ se replegó para los sectores vecinos, personal de aseo se encargó de retirar las piedras de las calles cercanas a la Alcaldía y la Plaza Cívica Batalla Boyacá.
También fueron destruidas las instalaciones de la concesionaria Tuluamotos, ubicada frente al parque Céspedes, antes Parque Simón Bolívar.
Un día antes, en horas de la mañana el alcalde John Jairo Gómez había realizado la tercera mesa de concertación con comerciantes, empresarios, fuerzas armadas, Personería e integrantes del Paro nacional para apostarle “a posibles soluciones y al diálogo como camino de entendimiento y a la construcción de paz en el municipio”. Al evento también acudió la Procuradora Provincial de Guadalajara de Buga Diana Isabel González. La confidencialidad conque trataron los temas no permitieron que transcendiera alguna noticia de interés.
No obstante, este martes los integrantes de la ‘Resistencia’ fueron sorprendidos a las cuatro de la mañana por el Ejército y el Esmad que llegaron a las salidas norte y sur con órdenes de desbloquear la doble calzada a su paso por Tuluá. Tras fuertes enfrentamientos, veinte personas fueron capturadas y luego puestas en libertad en el transcurso del día.
Simultáneamente con la reunión promovida por el alcalde de Tuluá con algunos gremios públicos y privados y la Procuraduría Provincial, el ingeniero Julián Girón, vía telefónica, promovía una mesa de concertación con la concurrencia del obispo de Buga José Roberto Ospina; el rector de la Uceva Juan Carlos Urriago Fontal; directivos de la Univalle, la Cámara de Comercio y la Administración Municipal. “El objetivo era el de reunirnos con los líderes de la protesta, conocer sus necesidades y convertirlas en un pliego de condiciones que fueran elevadas a la Gobierno nacional en aras de que su lucha encontrara eco”, explicó Girón.
De la misma manera, la idea era convenir un corredor humanitario que permitiera la normalización de los procesos productivos, empresariales, comerciales y de la salud en aras de no afectar a los pacientes crónicos y la economía de la región. Esta iniciativa que ya contaba con la aprobación del Alcalde y demás gremios se frustró con la acción policial en los puntos de bloqueo en las salidas norte y sur de la ciudad.