Por: Marcial Blandón
Se consolida la coalición de gobierno en el Congreso de la República, que respaldará la gestión presidencial que emprenderá a partir del siete de agosto el dúo Gustavo Petro y Francia Márquez. El respaldo de los partidos políticos tradicionales tendrá repercusiones en la región. La decisión mayoritaria de los Congresistas del partido Conservador, prevé una crisis al interior de la dirección nacional de la colectividad. La decisión de los parlamentarios va en contravía de la postura que estableció el máximo dignatario azul, el caldense Omar Yepez Álzate.
Mientras el presidente del directorio nacional marcó una línea para que la bancada Conservadora, ejerciera oposición al nuevo gobierno, los Congresistas firmaron un documento público para hacer parte del acuerdo nacional convocado por el nuevo inquilino de la casa de Nariño, Gustavo Petro. Todo indica que, ante la desobediencia de la bancada, su presidente dará un paso al costado.
Lamentable la situación del partido Conservador en el Valle del Cauca, mientras que a nivel nacional sigue conservándose como una fuerza política decisoria, en esta región del país tiende a desaparecer. El fracaso en las elecciones legislativas del pasado trece de marzo, obliga a la dirigencia azul unificarse en propósitos comunes si no corren el riesgo de perder representación tanto en el Concejo distrital de Cali como en la Asamblea departamental.
Similar decisión tomó la bancada del partido de la U. que, sin duda, beneficiará las futuras aspiraciones electorales de la médica Dilian Francisca Toro Torres, lo que le podría generar una alianza entre las fuerzas políticas que respaldan al nuevo gobierno de Gustavo Petro, para buscar su elección en la gobernación del Valle, en fórmula con un candidato del Pacto Histórico, para la alcaldía de Santiago de Cali.
La dinámica de la política hace que estos dos partidos, el Conservador y la U, en el marco de la gran alianza nacional propuesta por Gustavo Petro, tengan la posibilidad de estar representados en el gabinete ministerial en el gobierno del Pacto Histórico, cuando fueron grandes antagonistas en la disputa presidencial. No sería nada raro, que un vallecaucano con el guiño de Dilian, ocupe un ministerio en el gobierno del cambio que se instalará a partir del siete de agosto.
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El exconcejal tulueño Antonio José Galvis Arboleda, presentó renuncia ante la dirección nacional del partido Conservador, colectividad que lo avaló en su aspiración de alcanzar una curul en el Concejo municipal, obteniendo el respaldo de 1.645 electores en 2019. En la misiva el dirigente agradece al partido el apoyo brindado durante su militancia en las huestes azules y el respaldo en la búsqueda de los objetivos propuestos. Galvis Arboleda, se despide deseándole éxitos en el nuevo proceso democrático que vive el país, al partido que lo abrigó en su corta estancia.
Como se recordará Antonio Galvis, estuvo de frente en su condición de militante del partido Conservador, como una buena parte de la clase política tradicional respaldando la candidatura de Gustavo Petro. El trabajo proselitista lo hizo como persona cercana al Senador Liberal Luis Fernando Velasco, que suena como ministro del Interior en el gobierno del Pacto Histórico. Galvis Arboleda, buscará nuevos horizontes en el sector político que está de moda.
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La pasada contienda electoral que definió la nueva pareja de inquilinos en la casa de Nariño, ha sido una de las más agresivas que se han dado en los últimos años. Las propuestas de los candidatos pasaron a un segundo plano, para dar paso a los ataques de todos los bandos que disputaban el solio de Bolívar. Pasado el certamen electoral se siguen presentando hechos bochornosos de ataques a simpatizantes de campañas diferentes a las de Gustavo Petro. En el municipio de Zipaquirá, en Cundinamarca, el afectado fue el mural del ciclista ganador del Tour de Francia y el Giro de Italia, Egan Bernal.
En Tuluá, fue vandalizada la sede desde la cual se impulsó la candidatura presidencial de Rodolfo Hernández, de la Liga de Gobernantes Anticorrupción. La valla ubicada a un costado fue hecha trizas. Sus seguidores en la Villa de Céspedes, la reestablecieron prontamente. Sucesos como los narrados, dan a entender que pasada la contienda electoral los ánimos siguen al rojo vivo, por parte de los seguidores de quien resultó ser el nuevo presidente de la República. Acciones que van en contravía de su menaje que pretende unir al país a través de un gran acuerdo nacional entre todos los sectores políticos.
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Al cierre de esta sección no podemos pasar por alto los hechos que hoy llenan de tristeza y consternación a Tuluá con la muerte de 52 internos y 30 más heridos tras un incendio en el pabellón ocho de la antigua cárcel circuito de esta ciudad.
De acuerdo con la versión oficial, los hechos ocurrieron a eso de las dos de la mañana cuando en la ciudad, a pocas cuadras de allí, los asistentes a la Feria veían en medio de trago y música, como las últimas horas del evento agonizaban. Se presume que dos internos iniciaron una gresca que al cabo de algunos minutos continuó con dos colchones incinerados. Las llamas se extendieron a lo largo del pabellón número ocho en medio de los llamados de auxilio de cerca de dos cientos internos.
Conoció extraoficialmente Diario de Tuluá que a esa hora solo estaban de turno tres guardas de los 17 que dispone la Cárcel de Circuito. Se presume que el resto se encontraban de descanso o en Feria. Los uniformados tuvieron que sopesar cuál era la decisión más acertada, si abrir las puertas para que no murieran, mas corrían el riesgo de una fuga masiva. O intentar asumir la conflagración, pero no encontrar extintores suficientes. Saldo de la trágica madrugada: 52 muertos, muchos de ellos sin identificar porque sus cuerpos quedaron calcinados y 30 heridos, entre ellos, dos de gravedad.
Es momento que la Procuraduría General de la Nación inicie una, de verdad, seria investigación de este hecho y qué se determine responsables para que la muerte de estos hombres no quede en la impunidad. Es sorprende que un pabellón con cerca de doscientos hombres no exista un adecuado sistema contra incendios. Y se debe investigar porque los tres guardias prefirieron dejar las puertas del pabellón cerradas en lugar de abrirlas para que los internos no tuvieran este triste y repudiable final. Nuestras sentidas condolencias y solidaridad con las familias afectadas.
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