Dardos políticos en tiempo de Coronavirus

Por: Marcial Blandón

La impugnación aceptada por el Consejo Nacional Electoral, CNE, sobre la declaración política emitida por el Partido Conservador Colombiano, de declararse partido de gobierno en relación al mandato del presidente de la República Gustavo Petro, puede traer repercusiones a la colectividad en lo local, especialmente en regiones como el departamento del Valle del Cauca, que se quedaron sin representación en el legislativo.

La gran contradicción de los Conservadores consiste en que el partido representado en el Congreso de la República, se declaró políticamente como colectividad gobiernista, mientras que la dirigencia no representada en el legislativo rechaza la postura por ir en contravía de los principios con los que se fundó el partido. Tal es el caso del exgobernador del Valle Ubeimar Delgado Blandón, que fustiga la decisión de los Congresistas azules.    

La demanda que cursa en el CNE, puede conllevar a que la dirigencia inconforme del partido Conservador solicite una escisión de la colectividad para darle vida jurídica a un nuevo partido que llevaría el nombre de “Nuevo Conservatismo”. De ser autorizada la ruptura de la colectividad, la decisión se sentiría en la estructura del partido en municipios como Tuluá, donde cuentan con una representación en el Concejo municipal de tres escaños en cabeza de Cristian Hernández, Carlos Arturo Londoño y Eliecid Ávila.

Las deserciones de un amplio sector de dirigentes del partido Conservador en la Villa de Céspedes, y el surgimiento de una nueva colectividad nacida de esas huestes, podría complicar más la situación de los azules en Tuluá, de cara al certamen electoral de 2023, sin tener en cuenta que la Reforma Política avanza en el Congreso avalando el transfuguismo de partidos por una única vez, situación que es vista con buenos ojos por lo menos para un Concejal que hoy ostenta la investidura en representación el partido de Caro y Ospina.

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Desde que se instaló la elección popular de alcaldes a través del voto popular, Tuluá no ha elegido a una mujer como mandataria. De acuerdo al abanico de candidatos que se vislumbran para el certamen electoral de 2023, la del 29 de octubre será similar, será un hombre el que dirija los destinos de la ciudad para el cuatrienio 2024-207. Por ahora no se percibe una dama que tenga opciones para la venidera contienda electoral.

Mientras llega ese momento para la mujer tulueña, la alcaldesa encargada Eliana Andrea Bedoya Bueno, cumple a cabalidad con la misión encomendada por el titular del cargo. La inauguración del alumbrado en acto que congregó a cientos de tulueños, la dinámica que le imprime a cada una de las novenas organizadas por la administración municipal y mantener el ritmo del gobierno “De la gente para la gente”, le dan el reconocimiento, ratificando que la ciudad si puede ser gobernada por una dama preparada y capaz como lo viene haciendo Bedoya Bueno.

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La ex rectora de la Institución Educativa Técnica de Occidente Ana Francy Gómez Quintero, dicen amigos cercanos, estar contemplando la posibilidad de presentar su nombre como candidata al Concejo Municipal. Si la Reforma Política que queda pendiente de cuatro debates en el Congreso el próximo año se aprueba como va y sale adelante las listas cerradas de forma paritaria Ana Francy Gómez, dado su liderazgo en la ciudad sería una candidata apetecida por varios partidos que deberán integrar sus listas bajo el nuevo sistema.

Ana Francy Gómez, cuenta con amplio reconocimiento en el sector público. Ha sido una dirigente de armas tomar en el sector educativo, es polémica y le canta la tabla a quien sea cuando considera tener la razón. Sufrió el flagelo del mortal virus del covid-19, al que derrotó  con su fuerte carácter y su férrea voluntad de vida. Gozando de su pensión de jubilación en la tranquilidad de su hogar, no descarta la posibilidad de ser candidata al Concejo municipal para ejercer control político con la vehemencia que la caracteriza a quien resulte ser elegido alcalde de Tuluá el próximo 29 de octubre.

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Con la responsabilidad de ser el candidato ungido por el movimiento Nueva Generación el licenciado Ever Villegas Morante, comienza a analizar el movimiento de cada pieza del ajedrez en el que esta convertido el panorama político tulueño y la estrategia con la que espera superar a sus adversarios en las fases que aún le esperan en el largo camino para llegar al palacio municipal. Entre esos contrincantes, el nombre del actual concejal Conservador Carlos Arturo Londoño Marín, no puede pasar desapercibido.

La propuesta de Carlos Arturo Londoño, se consolida en la medida que la acerca a la comunidad tulueña. El sector de comerciantes en el ramo de abarrotes lo ven como su auténtico vocero, su paso por la corporación edilicia lo ha acreditado como un gestor de las necesidades de la gente ante el Estado. Ya anunció al interior de la colectividad que representa,  su interés  de alcanzar el aval para convertirse en candidato por el partido Conservador a la alcaldía  de Tuluá, una opción que cada día se consolida más.

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